Aprender y enseñar ciencia,
de Pozo & Gómez Crespo
Ediciones Morata, 1998
Dando respuesta a la pregunta sobre los fines de la educación científica para la enseñanza media, Pozo presenta las 5 metas o finalidades que Jiménez Aleixandre y Sanmartí proponen:
1. El aprendizaje de conceptos y la construcción de modelos.
2. El desarrollo de destrezas cognitivas y de razonamiento científico.
3. El desarrollo de destrezas experimentales y de resolución de problemas.
4. El desarrollo de actitudes y valores.
5. La construcción de una imagen de la ciencia.
Al traducir estas metas en contenidos concretos de enseñanza, Pozo propone los tres tipos de contenidos educativos que se corresponden con tres tipos de dificultades de aprendizaje:
1. Contenidos Verbales
2. Contenidos Procedimentales
3. Contenidos Actitudinales
En este trabajo nos abocaremos al estudio de los contenidos actitudinales. Pozo aborda la temática de éstos a través de cambio de las actitudes de los alumnos ante la ciencia; concretamente se refiere al problema de falta de motivación.
Usando la metáfora de los estados de agregación de la materia, el autor se refiere a las dificultades en el trabajo y evaluación de los contenidos actitudinales, como el estado gaseoso:
"Como los gases, las actitudes tienden a estar omnipresentes pero ausentes de nuestros sentidos, a mezclarse unas con otras, a filtrarse por todas las grietas del currículo."
"Las actitudes, en la medida en que como los gases, son difícilmente fragmentables, requieren un trabajo más continuo, más a largo plazo. su cambio es menos perceptible pero, cuando se produce, da lugar a resultados más duraderos y transferibles (como los gases, se difunden, ocupan todo el espacio, no se mantienen quietos y separados como los sólidos)."
Por estas características la enseñanza de los contenidos actitudinales es más general y transversal que los otros dos contenidos. Están en todo el currículo, no es responsabilidad exclusiva de nadie en particular pero al mismo tiempo lo es de todos en general; por esto mismo son contenidos que requieren un consenso de todos los profesores para que su enseñanza sea fructífera.
Pozo se refiere al cambio actitudinal o cambio conductual como los procesos que se deben dar para que sea efectivo el aprendizaje de este tipo de contenidos. Es el equivalente constructivista al cambio conceptual; al igual que para los conceptos y procedimientos, para la enseñanza de las actitudes hay que generar conflicto, en este caso, conflicto sociocognitivo.
El sujeto construye o reconstruye sus actitudes a partir de la forma en que percibe y razona sus propias acciones. Por esto, es necesario reflexionar y tomar conciencia de los valores que subyacen a las acciones. Es necesario que el profesor tome conciencia de las actitudes que tienen los alumnos, aquellas que queremos promover y aquellas que estamos promoviendo realmente a través de nuestra práctica docente.
Para el cambio actitudinal es necesario generar conflicto; dirá el autor:
"La introducción de conflictos o inconsistencias desestabiliza las actitudes y fomenta el cambio, ya que en general esos desequilibrios son desagradables cuando se perciben"
Pozo plantea 2 tipos de conflictos sociocognitivos:1. El conflicto entre las propias actitudes y el grupo de referencia. Es más fácil cambiar las actitudes cuando el grupo al que nos identificamos mantiene actitudes diferentes a las nuestras.
2. Conflicto por disonancia cognitiva. Se da cuando percibimos que nuestra conducta no se ajusta a mis creencias.
Como vemos en el primer caso el énfasis está en el aspecto social del conflicto: se procura dejar en evidencia la asintonía de actitud entre la persona y el grupo al que pertenece. Pensamos que se hace uso de este recurso por ejemplo cuando conformamos equipos integrando alumnos con determinadas actitudes beneficiosas para que catalicen el cambio de otros con carencia de ellas; también en aquellos casos de distribución de alumnos en el aula para favorecer el cambio actitudinal por cercanía o distancia de determinados compañeros.
En el segundo caso el énfasis está dado en el aspecto cognitivo. El conflicto se genera cuando se toma conciencia de que las actitudes que se sostienen son incosistentes con nuestra creencias o conocimientos del tema. A nuestro juicio un muy buen ejemplo de esto lo tenemos con los cambios de actitud que podemos generar en los estudiantes como consecuencia de conocer más y mejor científicamente algunos temas.
Decíamos al inicio que Pozo trabaja la temática de las actitudes en relación a la motivación. En cierta forma la motivación del alumno para aprender ciencia es algo que le compete a él pero también al profesor. Desde este último lugar, es decir desde el docente, la motivación pasa a ser en cierta forma un contenido a ser enseñado, al tiempo que es un ingrediente fundamental para que se den los aprendizajes de otros contenidos. Dirá el autor que el aprendizaje intencional explícito requiere continuidad, práctica, esfuerzo, todo lo cual está muy enrrabado con la motivación que se tiene.
"... la motivación ante una tarea es el producto de la interacción entre dos factores: la expectativa del éxito en una tarea y el valor concedido a ese éxito."
El grado de motivación de un aprendiz a su vez entra en un círculo que puede ser vicioso o virtuoso. En el primer caso el alumno no aprende porque está escasamente motivado y como no aprende tampoco se mejora la motivación que tenía al inicio; en el círculo virtuoso el aprendizaje obtenido actúa incrementando la motivación que a su vez genera más aprendizaje.
¿Cómo comenzamos a motivar a los estudiantes? Citando a Claxton, dirá Pozo que motivar es cambiar las prioridades de una persona, en nuestro caso, cambiar las actitudes ante el aprendizaje de la Biología.
La motivación por aprender ciencia puede ser extrínseca, es decir por las recompensas de aprobar, "por la nota" (calificación o promedio), o puede ser una motivación intrínseca, entendiendo por esta:
".... descubrir el interés, el valor, que tiene acercarse al mundo, indagando sobre su estructura y naturaleza, descubrir el interés de hacerse preguntas y buscar las propias respuestas."
En la motivación intrínseca el objetivo de la persona es aprender más que aprobar (aunque esto último vendrá seguramente de la mano de lo primero).
Ahora entonces nuestra gran pregunta es: ¿cómo favorecer o promover una motivación intrínseca en los alumnos? Nos dice Pozo:
"... la enseñanza debe tomar como punto de partida los intereses de los alumnos, de buscar la conexión con su mundo cotidiano, pero con la finalidad de trascenderlo, de ir más alla, e introducirles, casi sin saberlo, en la tarea científica."
Todo el remarcado en negrita es nuestro. La implementación didáctica de esta postura necesariamente implica: participación activa de los alumnos, interacción entre alumnos y con el docente, localizar centros de interés en los alumnos, conocer a los alumnos.
En el siguiente sitio web se esquematizan características de los contenidos educativos; también se ejemplifican los mismos.
http://iteso.mx/~carlosc/pagina/documentos/innova_normal/unidida5.htm
Preguntas de análisis y reflexión de la práctica docente, a partir de los conceptos del autor.
- Explique al menos con un ejemplo, el trabajo de contenido actitudinal en relación directa con contenidos verbales disciplinares de Biología.
- Explique al menos con un ejemplo, el trabajo de contenido actitudinal en relación directa con contenidos procedimentales disciplinares de Biología.
- Explique al menos con un ejemplo el trabajo de contenido actitudinal a partir de la generación de un conflicto sociocognitivo.
- Explique como una estrategia o acción realizada por usted en su práctica, procuró favorecer el desarrollo de motivación intrínseca en sus alumnos.